La Grande Chapelle / Madrigales de Francisco Guerrero

XXVII Festival internacional de Música Antigua y Barroca de Peñíscola (Producción del Institut Valencià de Cultura, Diputació de Castelló y Ajuntament de Peníscola)

Sábado 30 de julio de 2022 -  22.30h - Patio de Armas del Castillo del Papa Luna - Precio: 12 euros

Entrada 12 euros:

https://taquilla.ivc.gva.es/janto/main.php?Nivel=Evento&idEvento=300722CHAPELLE

La Grande Chapelle

La Grande Chapelle es un conjunto vocal e instrumental de música antigua con vocación europea, cuyo principal objetivo es realizar una nueva lectura de las grandes obras vocales españolas de los siglos XVI a XVIII, con especial predilección por la producción policoral del Barroco. Al mismo tiempo, tiene el propósito de contribuir a la acuciante labor de recuperación del repertorio musical hispano.

La Grande Chapelle ha actuado en los principales ciclos de España y en los festivales de Haut-Jura, Musica Sacra Maastricht, Laus Polyphoniae de Amberes, Rencontres musicales de Noirlac, Cervantino de Guanajuato, Radio France, Ribeauvillé, Saint-Michel en Thiérache, Saintes, Île-de-France, Van Vlaanderen, Lyon, Herne, Cremona, Estocolmo, La Valeta (Malta), Resonanzen de Viena, etc. o en las temporadas de la Cité de la Musique de Paris, UNAM de México, deSingel (Amberes), Teatro Mayor (Bogotá), Gran Teatro Nacional de Lima, entre otros.

Desde su fundación en 2005 y estimulado por la voluntad difundir el patrimonio musical hispano, creó su propio sello, Lauda, con el que edita cuidadas grabaciones de alto interés musical y musicológico, desde una posición independiente. Dos han sido los principales ejes: explorar la relación entre música y literatura de los Siglos de Oro y recuperar la producción de los más destacados compositores españoles del Renacimiento y el Barroco, siempre con primeras grabaciones mundiales, especialmente a través de recreaciones musicológicas que sitúan en su contexto una determinada obra o autor.

En 2010, recibió el I Premio FestClásica (Asociación Española de Festivales de Música Clásica), por su contribución a la interpretación y recuperación de música inédita española. Por su calidad y su solvencia artística, los discos de La Grande Chapelle / Lauda han obtenido galardones y premios nacionales e internacionales de reconocido prestigio en el mundo de la música antigua, tales como dos Orphées d’Or (Academia del Disco Lírico de París, en 2007 y 2009), Sello del año de los Prelude Classical Music Awards 2007, 5 de Diapason, Excepcional de Scherzo, Choc de Classica, Preis der deutschen Schallplattenkritik (PdSK), Editor's Choice y Critic's Choice de Gramophone, etc.

 

Albert Recasens

Tras sus estudios musicales en Tarragona, Barcelona, Brujas y Gante, cursó la carrera de musicología en la Universidad Católica de Lovaina, donde se doctoró con una tesis sobre la música escénica madrileña del siglo XVIII. Desde los inicios de su carrera, combina la práctica musical, la gestión y la investigación musicológica, convencido de que es necesario un esfuerzo interdisciplinar y un compromiso total para divulgar el patrimonio musical olvidado. Ha publicado artículos musicológicos en varias revistas y enciclopedias, nacionales y extranjeras, y ha sido miembro de proyectos de investigación (UAM, UB). Su proyecto de recuperación Pedro Ruimonte en Bruselas fue beneficiario de las Ayudas Fundación BBVA a Investigadores y Creadores Culturales 2016.

En 2005, inició un ambicioso proyecto de recuperación del patrimonio musical español con la fundación del conjunto La Grande Chapelle y el sello discográfico Lauda. Desde entonces, está dando a conocer obras inéditas de los grandes maestros de los siglos XVI a XVIII (A. Lobo, P. Ruimonte, J. P. Pujol, C. Patiño, J. Hidalgo, C. Galán, S. Durón, J. García de Salazar, F. Valls, J. de Nebra, A. Rodríguez de Hita, F.J. García Fajer, J. Lidón, etc.) en lo que constituyen estrenos o primeras grabaciones mundiales.

En 2007, asumió la dirección artística de La Grande Chapelle. Desde entonces ha dirigido numerosos conciertos tanto de polifonía como de música barroca. Entre los estrenos de música teatral, cabe citar el auto sacramental La Paz Universal de Calderón de la Barca (con Juan Sanz y Ana Yepes), la ópera Compendio sucinto de la revolución española (1815) de Ramón Garay y las Fortunas de Andrómeda y Perseo (1653) de Calderón e Hidago (atrib.).

Considera una verdadera misión la edición discográfica, que recoja los resultados de las investigaciones llevadas a cabo para las restituciones musicales de La Grande Chapelle.

Desde septiembre de 2019 es investigador de Creatividad y herencia cultural en el Instituto Cultura y Sociedad (ICS) de la Universidad de Navarra.

PROGRAMA

I. AMOR ES VOLUNTAD DULCE Y SABROSA

Francisco Guerrero (1528-1599)
Prado verde y florido, a 4
Dejó la venda, el arco y el aljaba, a 4

Pedro Guerrero (ca. 1520) / Miguel de Fuenllana (ca. 1500-1579)
Amor es voluntad dulce y sabrosa ø+

Francisco Guerrero
Claros y hermosos ojos, a 5 ø+
Ojos claros, serenos, a 4
Tu dorado cabello, a 3
¡Oh dulce y gran contento!, a 5


II. POR ÁSPEROS CAMINOS

Anónimo / Alonso Mudarra (1510-1580)
Claros y frescos ríos, a 3

Francisco Guerrero
Ten cuenta, amor, a 3
Acaba de matarme, a 4 ø+
Bajásteme, señora, a tal estado, a 5 ø+

Pedro Guerrero
¡Oh, más dura que mármol!, a 4

Alonso de Mudarra
Por ásperos caminos

Francisco Guerrero
Huid, huid, oh ciegos amadores, a 4

III. VANA ESPERANZA

Francisco Guerrero
Decidme, fuente clara, a 5 ø+
¿Sabes lo que hiciste, oh muerte dura? a 5
Pluguiera a Dios, a 5
Vana esperanza, a 4
En tanto que de rosa, a 5 ø+

ø+ Recuperación histórica de la versión profana, estreno en tiempos modernos

[Duración: 70 minutos]

Francisco Guerrero: canciones y madrigales

La Grande Chapelle ofrece un recorrido por el madrigal español del quinientos, encarnado en la figura de Francisco Guerrero, desde los aspectos más optimistas del sentimiento amoroso a la reflexión moral final, pasando por la apelación en tono de confidencia a los elementos de la naturaleza y el amor contrariado. Los madrigales musicales se apoyan en los poetas más reconocidos de la literatura del siglo renacentista, a la vez que reflejan la trayectoria vital y creadora del músico sevillano. Las obras han sido recopiladas a partir de distintas fuentes vocales e instrumentales.

NOTAS AL PROGRAMA

La construcción de la intimidad

Guillermo Fernández

El Renacimiento es el tiempo en que inicia su andadura una nueva concepción del mundo que conocemos como la modernidad. Y uno de sus pilares es una nueva conciencia de estar en el mundo y una nueva manera de relacionarse con él. Entre las más notables creaciones renacentistas está la construcción de la intimidad como espacio propio del sujeto y núcleo último del ser de cada cual. La intimidad descansa sobre la idea de una personalidad multiforme −singular y social a la vez, cordial y racional, activo y reflexivo− que trata de armonizar las variadas facetas, a veces en conflicto, que forman parte de ella. En la intimidad, el hombre renacentista experimenta su individualidad como ser sintiente que aspira a gobernar su vida de acuerdo con los sentimientos y, en función de estos, a desarrollar su pensamiento, desempeñar sus actos y conformar nuevas formas artísticas en las que trasluce su interioridad. Nuevas ideas para nuevos tiempos, y esto supone también nuevos medios de expresión acordes con las necesidades que imponen las nuevas emociones que se generalizan en toda Europa.

De aquí tiene su nacimiento el madrigal musical como punto en el que confluyen el alambicado mundo sentimental del petrarquismo, la adopción del verso endecasílabo y las formas musicales de las cortes italianas y del norte flamenco. En efecto, el madrigal –y muy especialmente en España− surge de la conciencia de la propia intimidad y en su desarrollo contribuye a moldearla, junto con la mejor poesía del momento.

Francisco Guerrero (1528-1599) es señalado por todos como el maestro de la expresión musical de los afectos. En 1560, Juan Vásquez destacaba su habilidad para dar forma a los sentimientos presentes en los textos: “… Francisco Guerrero –decía–, que tanto lo secreto de la música ha penetrado, y los afectos de la letra en ella tan al vivo mostrado”. Guerrero presta especial atención a las características comunicativas de los textos para exprimir su carácter confidencial, sea en la queja amorosa o en la reflexión moral. La música, que se pliega a los matices de la poesía, amplifica la pugna entre las fuerzas en conflicto, representadas por las distintas voces del madrigal polifónico, donde, por lo general, las voces agudas expresan la realización ideal del yo mientras que las graves apelan a los aspectos más sombríos y destructivos.

En efecto, los textos que se van a cantar en este concierto indagan en cómo los sentimientos –el amor, la desolación, la dignidad moral– se abren paso dolorosamente en la compleja personalidad del hombre moderno hasta instalarse en el centro mismo de su ser. De manera más decidida que el madrigal italiano o el inglés, el madrigal español es el sonido de la intimidad, de sus afanes, de sus esperanzas y de sus temores, de sus certezas y de sus dudas, de sus anhelos y de sus decepciones. Texto y música forjan la nueva intimidad y se presentan como garantía de la autenticidad del individuo, entendida como la fiel correspondencia entre su imagen y el fondo más recóndito de su persona.

A diferencia de lo que es común en Italia, los músicos españoles rara vez llaman “madrigales” a las piezas que van a escucharse esta noche, a pesar de las semejanzas con los madrigali italianos. El uso de este término en España es escaso, acaso porque los músicos se sienten más identificados con los textos que recrean en sus composiciones que con un género o una tradición musical. De ahí la peculiaridad del madrigal renacentista en España: en contraste con la progresiva tendencia al academicismo en el madrigal italiano, el madrigal español adquiere particular fisonomía por su tono más grave, en correspondencia con los textos que recrean musicalmente. De esa correspondencia trata un conocido soneto de Gutierre de Cetina que, por su oportunidad, merece ser reproducido en esta ocasión:

 

A UNA DAMA QUE LE PIDIÓ ALGUNA COSA SUYA PARA CANTAR

No es sabrosa la música ni es buena,
aunque se cante bien, señora mía,
si de la letra el punto se desvía:
antes causa disgusto, enfado y pena.

Mas si a lo que se canta acaso suena
la música conforme a su armonía,
en lugar del pesar que el alma cría,
de un dulce imaginar la deja llena.

Vos, que podéis mover al son del canto
los montes, no queráis cantar enojos
ni el secreto dolor de mi cuidado.

Quédese para mí solo mi llanto;
vos cantad la beldad de vuestros ojos:
conformará el cantar con lo cantado.

Transcripciones/revisiones de las obras musicales:

Miquel Querol Gavaldà, Mariano Lambea, Albert Recasens

Concepción del programa y revisión filológica

Guillermo Fernández Rodríguez Escalona

La cita a estas dos colecciones refieren a la numeración moderna, no a la foliación.

Cancionero musical de la Casa de Medinaceli (siglo XVI), I: Polifonía profana, transcripción y estudio de Miquel Querol Gavaldà, Barcelona, CSIC, 1949 (vol. i) y 1950 (vol. ii).

Francisco Guerrero, Canciones y villanescas espirituales (Venecia, 1589), transcripción de Vicente García, introducción y estudio de Miquel Querol Gavaldà, Barcelona, 1955 (vol. i) y 1957 (vol. ii).

Florencia Menconi, soprano

Lorena García, soprano

Rodrigo Carreto, tenor

Javier Martínez Carmena, tenor

Víctor Cruz, bajo

Manuel Minguillón, vihuela

Albert Recasens, director